Un viaje en el tiempo desde 1928 para rememorar el esplendor del ferrocarril de comienzos del siglo XX
Ilmiodesign aplicó distintos acabados de madera técnica para recrear ambientes contemporáneos y nostálgicos en esta restauración para un hospitality de lujo.
Obra: Canfranc Estación, a Royal Hideaway Hotel.
Proyectista: Ilmiodesign.
Productos: Fimaplast y Fibraplast Nogal Siroko Atlas, MDF y Fibraplast ignífugo Olmo Ontario Poro Arenado.
Aplicaciones: Mobiliario, armarios y panelados.
Localización y año: Canfranc (Huesca), 2023.
LA CLAVE DEL PROYECTO:
“LAS SOLUCIONES DE FINSA NOS PERMITIERON UNIFICAR TODOS LOS ACABADOS DE MADERA DEL HOTEL POR SU CALIDEZ Y ELEGANCIA, FUSIONADAS CON SUTILES ELEMENTOS ART DÉCO”
ANDREA SPADA Y MICHELE CORBANI, FUNDADORES DE ILMIODESIGN
La remodelación y restauración de la estación transpirenaica de Canfranc (Huesca), inaugurada en 1928, rezuma historia: paso entre España y Francia, almacén de oro nazi, refugio de judíos… Por todo este bagaje no podía resultar en otro tipo de hospitality que uno de lujo, donde se mantuviese la esencia del patrimonio industrial.
Ilmiodesign fue el responsable del interiorismo y el seguimiento del proyecto, y tuvo claro desde el primer momento que debían crear “un look&feel que devolviese y evocase el esplendor del ferrocarril de principios del siglo XX, inspirándonos en la estética de las antiguas estaciones y de los lujosos trenes de largo recorrido, con sus particulares vagones y elementos representativos, pero aportando un toque contemporáneo”, detallan desde el estudio.
El punto de partida en interiorismo fue “unificar todos los acabados de madera del hotel”, recreando espacios cálidos y elegantes que “se fusionasen con sutiles elementos art déco para crear ambientes contemporáneos y nostálgicos”. Aquí, explican, encajaron a la perfección las soluciones de Finsa aplicadas en mobiliario, armarios y panelados de este viaje en el tiempo a través de un hospitality de lujo.
Sobre la elección de acabados, matizan que eran “la idea que teníamos de las maderas utilizadas en los primeros años del siglo XX en los trenes de lujo que viajaban a través de Europa, como el Orient Express”. Destacan que la estética de la madera técnica y sus acabados “han mejorado muchísimo en los últimos años, consiguiendo un aspecto natural excepcional. A ello se suman su resistencia y facilidad de mecanización, lo que garantiza su durabilidad en el tiempo”, concretan desde el estudio.
Uno de los grandes retos del nuevo Canfranc Estación ha sido respetar e integrar el carácter monumental como Bien de Interés Cultural de la estación, respetando su estructura y morfología para darle una segunda vida en su renovación. Exceptuando el lobby, que estaba protegido, el resto del edificio se ha diseñado desde cero partiendo de la inspiración de las grandes estaciones de La Gare du Nord, la estación de Milán, Central Station… y añadiendo un enfoque respetuoso con el medio ambiente en la elección de materiales.
Otro aspecto relevante de este proyecto es que Ilmiodesign ideó en exclusiva casi todo el mobiliario, lo cual reforzó la singularidad de este hotel de lujo. A su vez, subrayan la iluminación como un factor indispensable “para potenciar la esencia de ese confort y sofisticación que buscábamos”, comentan. Bajo este fin realizaron un circuito de intensidad y color de la luz, así como ubicaron zonas puntuales mediante lámparas y apliques originales, todo ello piezas inspiradas en el mundo ferroviario, mezclados con cristal y latón.
No fue en vano que la prestigiosa revista AD eligió esta remodelación del edificio como una de las más impresionantes del mundo, justo cuando se cumplen casi cien años de su inauguración. Una joya exquisita de la arquitectura con los acabados más selectos a nivel técnico y ornamental.
